Hace días que no escribía, digamos que no me sentía en capacidad, mis palabras no fluían con gracia, con sutileza, no tenía en mis dedos la habilidad de pintar con los pinceles de mi alma…
Hoy vuelvo (muy feliz por cierto), a construir con un montón de letras lo que llamaré: “Un bosquejo de mi ser”
Han sido días transcurridos que contribuyeron enormemente a reacondicionar mí estado general…
Compartir con mis amigos es un regalo de la vida que no me cansaré de recibir…
Reprochar los absurdos ideales de la sociedad, será un habito que no se irá de mi nunca, ya lo he dado por sentado….
Cantar con ímpetu será por el resto de mis días, lo único que me libere de todo…
Recordar cada momento vivido será, solo un impulso para construir más recuerdos, cada vez hermosos, cada vez más reales…
Y debo hacer una especial excepción a una persona, que se ha encargado de dibujar en mi rostro, una sonrisa cada tanto, una sonrisa cada par de minutos…
Y ha convertido mis días en algo más llevadero, me ha mostrado la vida desde una perspectiva nueva, que invita a reconocer entre el tumulto de gente, el puñado de amigos que realmente valen…
Hoy he hecho una radiografía de mi vida, y he encontrado en ella, los pilares de mi existencia, he diferenciado mis vértebras de mis venas, mi cerebro de mi corazón…
Ya se finalmente, como salvar los órganos vitales de mi ser…
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